Pedro Antuña, un cabañero de Soriano, de larga trayectoria en la cría de Corriedale, vino a Tacuarembó con la intención de vender parte de su carnerada en el remate Especial de Lanares que se realizó la pasada semana en el local de la ART.
Su expectativa en cuanto a las ventas no fue colmada, incluso se mostró un poco desilusionado ante la poca demanda que se registró en esta subasta.
Dijo no poder determinar los motivos de tan poco interés, ya que "la carnerada que vino acá era de primer nivel y no había interesados. No era cuestión precios tampoco, porque había carneros buenos de todos los precios". No obstante, estimó que "se van a vender después, porque con el tiempo como ha venido debe de haber mucho carnero roto".
"Vengo todos los años, y todos los años voy vendiendo pero se está complicando. En Melo vendí todo, habrá que ver, quedan otras exposiciones, capaz que más adelante se vende. Ahora estoy bastante desilusionado", lamentó.
"Allá en la zona donde yo vivo, en Soriano, solo hay soja, así que si no salimos para este lado a vender ovejas, que es donde hay ovejas...Pero todavía quedan días de zafra".
En relación a los precios que se paga por los carneros, que se han mantenido parejos desde hace varias zafras, el Criador de Corriedale reflexionó: "Hace 10 años que estamos vendiendo al mismo precio pero los costos son otros; el costo de combustible para venir de Soriano hasta acá es otro que hace 10 años, y los carneros valen lo mismo, y el dólar también casi vale lo mismo".
"Soy cabañero por tradición, mi abuelo cabañero, mi padre cabañero, y yo cabañero. Siempre como un rubro más, no vivimos de esto pero siempre más o menos daba, pero ahora empezamos a sacar la cuenta y no estamos para perder plata", enfatizó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario