Lana del Uruguay con estilo italiano.

La cabaña uruguaya "La Santigna" produce una lana Merino Superfina de primera calidad que es requerida por la industria de tejidos de alto nivel, principalmente de Europa; actualmente ha estado exportando hacia Italia donde se fabrican telas para confección de vestimenta de excelente calidad y alto valor. El mercado está abierto, y es una gran oportunidad para los que buscan afinar sus lanas.

El proyecto hacia la lana Merino Superfina comenzó a principios de los 90, cuando Marco Frignani junto a Carmen Formoso se reunieron con las cabañas Merino Bullamallita, Merryville y Glenleigh en Australia y adquirieron 1.400 dosis de semen de sus mejores carneros.

En dos campos, uno en Artigas y el otro en Cinco Sauces (Caraguatá) y con una majada de más de 5.000 ovejas, criadas a campo abierto, la cabaña produce lana Merino con un promedio por debajo de las 18 micras, con propiedades que siguen la lana de estilo italiano -Italian Style-, "con finos rizos, color blanco, fibras largas y fuertes y un factor de confort elevado", explican en su página web. El objetivo siempre es "alcanzar un factor de confort cercano al 100% y rendimientos al lavado sobre 80%".

Consigna la cabaña que ya en el año 2017 alcanzaron las 13 toneladas de lana con una finura por debajo de las 18 micras, teniendo lotes de punta que se ubicaron en las 15 micras. "Nuestra lana tiene una buena estructura, con un color blanco puro y brillante y finos rizos, característicos del Italian Style que buscamos", se lee en la presentación de La Santigna: https://www.santignamerinos.com/

En la reciente "Más Carne Más Lana", venta especial de lanares realizada en la Rural de Tacuarembó, PALENQUE AGROPECUARIO y EL PALENQUE RURAL mantuvieron un diálogo con Mauricio Frignani (35 años), quien junto a su madre Carmen Formoso trajeron algunos borregos Merino Australiano para la venta.

Mauricio nació en Chile, hijo de un italiano y de una uruguaya de Tacuarembó, y su vida alterna entre nuestro país y el trasandino. "Me siento uruguayo en Uruguay, italiano en Italia y ahora estoy felizmente casado con una chilena, así que también chileno en Chile", dice sonriendo.

 "Nos enfocamos en tener una lana que sea apetecida por los mercados más exigentes del mundo, no solo una lana de 18 micras, sino una lana para un mercado europeo y que conforme a los mayores productores de tela y de trajes", explica el cabañero al definir los propósitos de la cría de Merino. Cuando estuvo en Italia, por motivos de estudios, estableció contacto con fabricantes que buscan este tipo de lana, "y logramos el primer objetivo de nuestra lana que es exportarla a ese país el año pasado".

 ¿Qué destino tiene esta lana?

"Estas personas no solo buscan las 18,5 micras, sino que también otros atributos de la lana. Por eso nosotros nos llamamos "La Santigna Italian Style". Este estilo italiano no solo radica en el micronaje, también debe tener un rizo de alta frecuencia -lo que comúnmente se le llama un vellón apretado, un vellón pesado-, que tenga resistencia a la tracción, buen rendimiento al lavado y más importante, el rendimiento al peinado. Esto es lo que más busca la cabaña, el rendimiento al peinado. Esta gente de Italia no solo procesan la lana, sino que producen tela que venden al mercado final; hacer esta tela hace que muchos de estos atributos sean visibles y le dan mayor valor. Como ejemplo, del negocio particular que hicimos el año pasado con Italia, después los mayores clientes fueran las mejores marcas italianas de trajes. Cuando la gente gasta mucho dinero en un traje lo primero que quiere es que no se le arrugue, y decían ellos que la lana, al tener esta alta frecuencia en rizo -el tipo Italian- hace que lafibra tenga "memoria". Entonces una vez que se lava la fibra, ésta continúa con su misma memoria, y esto uno lo puede ver en un vellón, si a un pedazo de lana se lo aprieta y lo suelta, vuelve al estado natural. Ese es un atributo que se trasmite a la tela".

¿Qué volumen de lana están produciendo en la cabaña?

El año pasado producimos en el entorno de las 15 toneladas de lana, con un micronaje de 17,6; y este año, gracias a que aumentamos la cantidad de los capones, esperamos tener alrededor de 17 toneladas. Todo grifa verde, con Delmir Rodríguez el esquilador de Artigas, y con Artigas Lemos que nos ayuda en Cinco Sauces.

¿Los precios acompañan este mejoramiento de la lana?

En nuestro caso, entre el 2015 y el año 2018 el valor aumentó un 110%, o sea, más que duplicamos el valor de venta por kilo de lana. Hoy en día la lana de 18,5 micras -según lo que nosotros notamos- es bastante más robusta en términos de diferenciación. Es la lana a que apuesta el mercado textil más exigente, como el italiano.

¿Es recomendable entonces seguir afinando? ¿Cuál es el mensaje para los productores laneros?

Que traten de afinar, y busquen este tipo de lana porque quizás en el futuro también ayude a que este país logre estabilidad en precio. Nosotros hemos apostado a la lana superfina y hoy, creo hemos encontrado el mercado que sí la acepta y la valora. Esa es la apuesta que tenemos como cabaña y que iniciaron mis padres hace 27 años.

Creo que en Uruguay existe muy buen producto. La calidad de los animales que vi acá (en el remate Más Carne Más Lana), tanto en carne como en lana son muy buenos. Y el trabajo de la gente se tiene que reflejar al mundo, y me ha tocado viajar por el mundo y comprobar que el productor que está acá es realmente destacable; y lo que hay que hacer es presionar para que eso se traduzca en valores.

CARMEN FORMOSO E HIJOS CONTINÚAN LA SENDA EN HONOR A FRANCO FRIGNANI.

La Tacuaremboense Carmen Formoso, quien junto a sus hijos lleva adelante la producción de La Santigna, confesó que "cada vez me gusta más trabajar con las ovejas; empecé con mi marido en el año 92 y ahora que él se fue, en honor a él, continuo y con mi hijo tratamos de mejorar lo que dejó: la cabaña Merino".

"Uruguay tiene una buena materia prima como hay poca en el mundo y que está escaseando en Australia, que ahora está con una sequía tremenda, sobre todo en New South Wales, justamente donde se produce la lana Merino fina. Y los mercados italianos necesitan esta lana, por eso vinieron acá -traídos por Mauricio- al Congreso Mundial Merino en abril del año pasado. Vinieron a ver la lana uruguaya y les gustó mucho", sostuvo la Sra. Formoso.